Exponiendo una notable superioridad y haciendo todos los merecimientos del caso, Guabirá goleó a Real Potosí por 3-0 ayer en Montero, tomándose revancha de dos derrotas consecutivas que tuvo fuera de su casa, que le permite seguir sumando todos los puntos jugando de local.
El marcador es un fiel reflejo de lo que sucedió en el recuperado Gilberto Parada, aunque la parte negativa fue la pobre asistencia de espectadores en las tribunas.
Dominio rojo. Los azucareros fueron dueños del partido a partir del minuto inicial. Ejercieron el dominio y la tenencia de la pelota, tuvieron mejores y mayores situaciones de peligro en el arco rival, hubo un gol, pero desperdiciaron al menos otros tres.
Entre el minuto 0 al 15, hubo un par de aproximaciones pero sin mayor peligro, hasta que a los 18' Melgar que coloca una gran pelota a Castillo que ingresaba por el otro lado, el “Negro” le pega combeado pero se va alta.
Sobre la media hora, el que desperdicia es Melgar que “blanquea” a Jordán que se encontraba en el piso y a los 33' casi Real llega al gol cuando Galaín frentea una pelota luego de un tiro de esquina y esta pega en el travesaño y se va.
Llega el gol. Hacía un minuto que Guimer Justiniano se había perdido un gol increíble rematando alto en la boca del arco y a los 36, gana una pelota, se va hasta el fondo, levanta un centro y en el otro lado empalma “Ojitos” Melgar para desatar la euforia roja.
Otras dos situaciones tuvo Ocampo, casi de la misma forma que le pegó Castillo antes, y sobre el filo mismo de la primera etapa, Melgar que elimina a Jordán pero se le va larga y cuando quiere dominar la pelota se fue afuera.
En resumen, el 1-0 quedó corto.
Dos golpes más. Aguirre, de gran partido otra vez, se fue hasta que remató, la pelota dio rebote en Jordán y afuera, pudo ser el segundo en apenas un minuto del reinicio.
Luego Castillo recibió un pase por elevación de Melgar y al mejor estilo del revés del tenis, le pegó y la pelota se fue apenas desviada, por la jugada, mereció ser gol.
Pero a los 14' Aguirre levantó un tiro libre y en el otro palo se elevó en solitario Espinoza, 2-0.
Por el lado de Real, un par de acciones de Saucedo y otra de Rojano que Arias conjuró y, cuando el partido se había cumplido y se jugaba dos de adición, Castillo, cuando no, estableció el 3-0 final. Guabirá se reivindicó y cumplió.
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