En un partido en el que el resultado podía ser favorable para cualquiera de los dos, Real Potosí y San José terminaron por dividirse honores al empatar ayer 1-1 en el marco de la décima sexta fecha del certamen Apertura que regenta la Liga del Fútbol Profesional Boliviano.
Para la visita convirtió el tanto Lisandro Alzugaray, mientras que para los locales empató el duelo el argentino Antonio Rojano, mediante la vía del penal, a los 43 minutos del choque.
Ambos elencos sabían que era imperiosa la necesidad de sumar las tres unidades que les permita seguir con el sueño de conseguir un boleto a un certamen internacional y con esa premisa ambos elencos salieron al campo de juego en pos de la victoria.
En la primera mitad el cuadro de Real Potosí perdió toda iniciativa de juego ya que los santos se adueñaron del mediocampo y desde ahí empezaron a generar peligro hacia el arco de Henri Lapczyk.
Hasta el minuto 30 del cotejo, San José fue el que más opciones de gol generó en el partido y esto fue premiado al minuto 36, cuando con un remate de más de 30 metros ensayado por Lisandro Alzugaray rompió el cero.
Este tanto fue un verdadero golpe para los locales que veían cómo se rompía la seguidilla de cinco victorias conseguidas en el estadio “Víctor Agustín Ugarte”.
Pero la alegría de la visita se desmoronó a los 43 minutos tras una falta innecesaria del arquero Carlos Franco que derribó en el área a Antonio Rojano. A esta jugada se sumó que el árbitro del partido, el cruceño Juan Nelio García, empezó a cobrar protagonismo dentro de cotejo ya que no le sacó la segunda amarilla al arquero de San José tras la falta cometida en contra del delantero lila.
Con un remate bajo al poste derecho, Antonio Rojano transformó el penal en gol para poner las cosas 1-1, a los 43 minutos del encuentro. Con el marcador emparejado, ambos equipos regresaron a sus vestuarios.
En la etapa complementaria, Real logró nivelar la balanza y se convirtió en un verdadero vendaval que buscó la segunda conquista. Pero San José que tenía la premisa de sumar en la Villa Imperial no se dejó estar y le jugó de igual a igual a los locales haciendo que el partido se convierta en un espectáculo atractivo para la gente que asistió al principal campo de juego de la Villa Imperial.
Al final pese a las opciones que ambos equipos generaron en uno y otro pórtico el marcador no se movió hasta el pitazo final distribuyendo a ambos equipos a una unidad.
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